martes, 28 de octubre de 2014

Mi historia con la lectura


Mi primer recuerdo con un libro fue de muy pequeño, no recuerdo que edad tenía pero siempre voy a recordar esa gran librera llena de toda clase de libros.
Mi madre siempre quiso inculcarme el valor de la lectura, constantemente me pedía que tomara un libro y lo leyese, intenté un par de veces leer un libro. Un Capitan de quince años, cuya historia no recuerdo, dos veces comencé a leerlo y ninguna funcionó a pesar de mi interés de fomentar el hábito. Años mas tarde aprendí que un libro jamas se debe de leer por obligación sino por el mero placer que causa leerlo.
Deje el libro en el olvido, jamas mi curiosidad lo necesito, pero mi curiosidad tenía hambre y sin darme cuenta tome una gran enciclopedia, la cual me acompaño por muchos años y en cualquier lugar que tuviera la oportunidad de tener una la ojeaba al azar. Estos libros saciaban mi curiosidad y me alentaban a buscar conocimiento y fueron estos inesperados libros los que me inculcaron el hábito de la lectura, los que me llevaron a mis primeros viajes por mundos imaginarios y maravillosos.
La mitología griega fue uno de los primeros temas que llamó mi atención, al describir a Ades me llevo al nombre de su padre Cronos y este al nombre de sus hijos y el nombre de sus hijos me llevo a descubrir uno de los mundos más fantásticos que encierra la mitología griega.
Sin darme cuenta ya estaba leyendo clásicos de la literatura que habían despertado cada vez mas mi curiosidad y que leí de una manera voraz.
En el camino también encontré personas que al ver mi interés en la lectura pues me recomendaron libros cuya lectura aun atesoro. Son pocos libros los que me han hecho dejar su lectura a medias pero el que mas recuerdo es "La Divina Comedia" éste libro a pesar de su fama nunca lo pude terminar, mientras Dante pasaba por el infierno y sus círculos, la lectura era interesantísima, pero al salir de allí ya no capto la misma atención de mi parte y la tuve que dejar en dos ocasiones.
A lo largo de mi vida logré apreciar el valor de lectura y encontré libros que han despertado en mi toda clase de sentimientos. Es por eso que me gustaría que muchas personas pudieran experimentar el placer de una buena lectura y tan solo con el hecho de leer he logrado despertar en alguna persona la curiosidad de leer.
"Creo que la frase "lectura obligatoria" es un contrasentido; la lectura no debe ser obligatoria. ¿Debemos hablar de placer obligatorio? ¿Por qué? El placer no es obligatorio, el placer es algo buscado. ¡Felicidad obligatoria! La felicidad también la buscamos. Yo he sido profesor de literatura inglesa durante veinte años en la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad de Buenos Aires y siempre le aconsejé a mis estudiantes: si un libro les aburre, déjenlo; no lo lean porque es moderno, no lean un libro porque es antiguo. Si un libro es tedioso para ustedes, déjenlo; aunque ese libro sea el Paraíso Perdido – para mí no es tedioso – o el Quijote -que para mí tampoco es tedioso. Pero si hay un libro tedioso para ustedes, no lo lean; ese libro no ha sido escrito para ustedes. La lectura debe ser una de las formas de la felicidad, de modo que yo aconsejaría que leyeran mucho, que no se dejaran asustar por la reputación de los autores, que sigan buscando una felicidad personal, un goce personal. Es el único modo de leer"
Jorge Luis Borges (Prólogo de "Borges Profesor")

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